Mi nombre es Gabriela Cottone, dicen que nací el 22 de noviembre de 1978 en la clínica del horror, conocida como “la clínica de Doña Elena”, en Wilde, partido de Avellaneda, al menos así figura en mi partida de nacimiento firmada por la partera Juana Elena Arias de Franicevich. Sin embargo, sospecho que pude haber nacido unos días antes de acuerdo a una receta pediátrica con fecha 20 de noviembre.

Toda mi vida sentí que algo no encajaba en mi historia, sin saber muy bien porque, ya que tuve los mejores padres de crianza que uno pueda llegar a desear, y quizá por eso nunca me animé a preguntar y vaya saber porque motivo ellos nunca pudieron enunciar mi verdad. 

Luego del fallecimiento de mis padres de crianza y tras encontrar algunos papeles de mis primeros meses de vida, que volvieron a hacer ruido en mi cabeza y sin tener la menor idea de por dónde empezar mi búsqueda, en el año 2013 me acerque a la CONADI, ya que por el año de nacimiento podría ser hija de desaparecidos. Al ver el nombre de la partera que firma mi certificado de nacimiento (Arias de Franicevich), me mandan directamente a hacerme el ADN al Hospital Durand (Banco Nacional de Datos Genéticos ), comunicándome más tarde que mi ADN no arrojó coincidencias con los datos genéticos que se encuentran cargados en el banco hasta ese momento, de manera que ellos no podían hacer nada más, debía seguir la búsqueda por mi cuenta. Así es como di por terminada mi búsqueda.

Lo único cierto es que nací algún día de noviembre de 1978, con ocho meses de gestación, de muy bajo peso (a la supuesta semana del nacimiento pesaba 2 kilos). 

Mi búsqueda tiene que ver con el derecho que todos tenemos de saber de dónde venimos, el derecho a conocer mi identidad y a conocer mi origen biológico.

Contactame: victimasdefranicevich@gmail.com